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Lo insostenible #ICN17

 

A estas horas siguen los fastos del congreso del CIE 2017 en Barcelona.

El congreso se celebra bajo el lema "Las enfermeras a la vanguardia mejorando los cuidados" y en el mismo hoy hay una mesa titulada "La Salud pública concentrada en la obtención de los ODS".

 El propio CIE lanzó con motivo del día internacional de la enfermería una iniciativa bajo el título "Enfermería una voz para liderar hacia los ODS" con un interesante documento que desgrana el papel de la profesión en cada uno de los objetivos acompañandolos de casos de estudio.

Pero lo mejor del documento viene al final en la parte titulada "¿Como puede ser usted una voz para liderar?" en la que se habla de la necesidad de la implicación individual y de la participación de la profesión en la generación de políticas
"Lo que cada uno de estos líderes de enfermería tenía en común era su activismo político derivado del conocimiento personal adquirido al prestar cuidados.."
En ese mismo texto encuentro esta frase... que ya había algo que me decía que no era de a quien se la escuché pronunciar el día 12 pero que no deja de tener validez
El liderazgo es un proceso no un puesto. Las opiniones de hoy en día sobre el liderazgo se han ido modificando hasta definir este concepto considerando procesos colaborativos que se producen en grupos y comunidades. El liderazgo está relacionado con la responsabilidad social y la buena ciudadanía, lo cual enlaza con las responsabilidades profesionales y éticas de las enfermeras de defender el derecho humano a la salud.
Así pues, es en cada control, en cada consulta, en cada ambulancia y en cada despacho (si ahí también) donde se debe liderar para alcanzar los objetivos de la infografía de arriba entre los que no está la autoimposición de medallas ni la persecución de las voces disidentes mediante expedientes disciplinarios.

Porque lo que es insostenible es que siendo todos responsables de liderar el avance de la profesión esta no se rija por principios democráticos ni se gobierne con transparencia.

¿Y conmigo qué pasa? #WelcomeICN17

Ayer empezó el evento cuadrienal con el que consejo internacional de enfermería trata de poner en valor el papel de la profesión en la atención a la salud en todo el mundo con estos objetivos principales:

"Demostrar y promover la contribución de la enfermería a las políticas de salud informadas y sostenibles.
Apoyar la contribución de la enfermería a la atención de salud basada en la evidencia y fomentar planteamientos de resolución de problemas para las necesidades prioritarias de salud."

Se trata de un "megaevento" con muchos intereses entrecruzados y muy difíciles de congeniar dado lo heterogeneo de la profesión tanto en su formación como en su estatus y visiblización social en todo el mundo. Diversidad que hace que el propio organismo internacional de la enfermería fundado en 1899 sea puesto en duda a la hora de evaluar su papel como portavoz y representante de tod@s las profesionales.

Uno de los focos de atención del CIE a lo largo de su historia ha sido la protección de los intereses de las enfermeras; intereses que, como no, tienen que ver con las condiciones laborales y retributivas de las mismas... o no.

En 1981 El CIE editó el libro cuya portada os presento y que viene a ser una recopilación de textos sobre la situación laboral de la enfermería en diversos países: Australia, Canadá, Colombia, Irlanda, Suecia, Dinamarca, Nueva Zelanda, Reino Unido e Israel así como una contribución de un alto ejecutivo de la OIT.

La mayoría de los textos se centran en la negociación colectiva y como había sido obtenido el derecho a la misma por parte de los colectivos profesionales en los diversos países así como las carencias que los representantes profesionales presentaban en su formación para tales negociaciones; incluye, además, el texto del convenio 149 de la OIT "sobre el empleo y condiciones de trabajo y de vida del personal de enfermería" de 1977. El ya citado texto del representante de la OIT viene a hablar de la aplicación de los convenios internacionales y sus mecanismos de control.

El interés del libro es Máximo dado que en uno de los capítulos una representante del Reino Unido se plantea si es el papel de una asociación de enfermeras el ser "órgano negociador" o si sólo debe actuar como "asesor" externo a un sindicato a la hora de negociar las relaciones laborales de las enfermeras.

Tal vez sea eso lo que estamos viviendo ahora y por ello no somos capaces de distinguir entre sindicato SATSE y consejo general de enfermería de España... tal vez dentro de 40 años sea hora por fin de hablar de transparencia y buen gobierno del CGE... tal vez todo eso esté en nuestras manos.

Razons para investigar #whywedoresearch

A ciencia non ten idioma, como moito ten unha linguaxe propia: a metodoloxía científica. Por iso escribo esta entrada no legado que me deixaron os meus vellos: a fala.

Arestora estase a celebra-lo tweetchat #whywedoresearch en castelán auspiciado e moderado por +Carmen Villar (@carmenvillarb na foto caracterizada como Mrs Evidence)

Unha conversa en 140 caracteres para dar resposta ás cuestions que abaixo vos poño tentando de saca-las claves da escaseza de investigación en coidados.

O papel da universidade na investigación en coidados e a distancia que semella que separa a esta do traballo diario na clínica e a preocupante falta de implementación da evidencia tamén formarán parte da conversa.

Dou por descontado que vos uniredes e se non podedes facelo sempre podedes lee-lo debate "tirando do hastag.
E aquí van as miñas respostas:

Q1-Investigar está ó alcance do sacrificio do tempo persoal e familiar das enfermeiras.
Q2-O que teñen semella que é obxectivos diferentes e non sempre orientados ó doente.
Q3-Facendo que os créditos horarios dos profesores asociados se adiquen non só ós alumnos senon a asesorar a investigación clínica.
Q4-Divulgar, divulgar e voltar a divulgar. En cada control, en cada consulta e en cada centro.

Pseudoresponsables?

José tiene cáncer... de colon.

A su hija se lo han dicho nada más salir de la intervención de urgencia que hubo que hacerle porque el tumor había ocupado toda la luz de intestino y se había acabado hinchando como un globo con unos dolores tremendos...

En la intervención le quitaron el tumor y parte de la tripa pero tuvieron que dejarle una bolsa de esas para "sus cosas" porque no se podía pegar la tripa hasta más adelante... y mientras tanto habría que darle tratamiento para evitar que el tumor atacase otras partes de su cuerpo si es que no lo había hecho ya.

José no quería tener aquella bolsa que lo tenía atado en casa con la verguenza de no poder salir por si se le soltaba... vaya broma... quería una solución ya no esperar 6 meses.

Cuando empezó con la quimio no notó nada y pensó que no sería tan difícil; para el final del segundo ciclo pensaba que a él no le mataba el cáncer sino aquel tratamiento.

Así que cuando le vino a visitar Luis y le contó que le habían dicho que un conocido de un amigo había ido a la farmacia de otro barrio a por un tratamiento "especial" y que se había curado del cáncer le faltaron pies para ir allá.

La persona que le recibió en la farmacia fue muy amable y conocía perfectamente lo que estaba pasando José; la bolsa, la quimio, el miedo... le miraba y sonreía. Empezó a contarle sobre su tratamiento "biológico" que estaba indicado para casos como el suyo y que el en la farmacia se lo podría susmistrar pero no tenía financiación; tendría que pagarselo él mismo... José miró los diplomas de la pared, el título de grado, la especialidad, cursos y miembro de la comisión de terapias alternativas del colegio profesional... estaba claro.

José inició el tratamiento con una "desintoxicación" que incluía abandonar la quimioterapia cosa que hizo de mil amores pues pensaba que aquello era el mal en si, lo peor que le estaba pasando...

Cuando llamaron a la hija para preguntar porqué su padre no se había presentado a las sesiones ni a las consultas en los últimos 3 meses casi colapsa... ¿¿¿¿QUUUUEEEEE???? omitiremos los llantos y los gritos, el miedo y la verguenza; la reconciliación y las lágrimas, la despedida... el entierro.

Semanas despues la hija de José recordó que su padre le había dicho que ese tratamiento "biológico" tenía que ser bueno porque el colegio profesional tenía una sección sobre ello... y se decidió verlo por si misma hacíendose pasar por paciente.

Cuando preguntó por "garantías" la amable cara del personaje cambio de gesto, torció los labios y dijo "es como la vida; algunas cosas no salen bien"; cuando le preguntó por el apoyo del colegio profesional le dijo "pues tenemos un grupo de trabajo que estudia estas cosas... ". Se decidió y le contó quien era y qué habia pasado con su padre....

A partir de aquí el relato del proceso judicial alargaría esto más de lo necesario pero en lo esencial la hija de José consiguió que al personaje se le sancionara y que el seguro de responsabilidad del colegio profesional pagara una suculenta indemnización de "pseudoresponsabilidad".

Y he aquí queridos amigos otro argumento por el que los colegios profesionales no deben tener secciones sobre Pseudociencias.

Residencias de práctica avanzada

http://observador.cl/5196-pacientes_del_hospital_san_mart_n_ser_n_hospitalizados_y_atendidos_en_sus_casas_para_descongestionar_servicios
Es muy difícil que si recibimos información (por el medio y tipo que sea) sobre los retos y cambios de la asistencia sanitaria recientes y futuros el crecimiento del grupo de población dependiente principalmente debido a la edad no forme parte de dicho discurso al que se añade con cada vez más frecuencia el incontestable hecho de que esa misma población por su vulnerabilidad es la que padece más enfermedades y por tanto recibe más tratamientos e intervenciones.

Desde casi el principio de este cuadernillo he sostenido que la asistencia a este grupo de población es "territorio de cuidados" y ahora, debido a la complejidad que acarrean las enfermedades y sus tratamientos/intervenciones, es un territorio de cuidados "complejo" que requiere profesionales "avanzados".

También es cada vez más frecuente en el discurso sobre el futuro de la sanidad que es necesario "deslocalizar" la asistencia a estos pacientes del hospital y por ende de los médicos igual que se ha hecho con muchos procesos quirúrgicos con la salvedad, en mi opinión, de que en mi visión esa atención será "intermitente" entre el hogar y centros de cuidados "expertos".

Los "skilled nursing facilities" podríamos definirlos como titulo esta entrada: Residencias de práctica avanzada aunque tal vez para ser coherentes con los dicho en el anterior párrafo debería hablar de "cuidados de práctica avanzada" uno de cuyos espacios de prestación serían esas residencias de práctica avanzada pero que también se desarrollarían en el hogar y ¿porqué no? en el hospital como parte de las transiciones asistenciales.

En EEUU estas "residencias" tienen un gran desarrollo y de hecho entra en el plan de cobertura de medicare aunque con limitaciones. ¿qué pueden aportar los cuidados de práctica avanzada al SNS? Pues las atenciones no tienen porqué limitarse ni en lo temporal ni en el enfoque (prevención, curación, rehabilitación, paliativo) para muestra un botón en forma de pequeño catálogo:
  • Recuperación tras ICTUS. Ayuda a la recuperación de habilidades motoras y funciones de habla.
  • Atención al Parkinson - Cuidados específicos para casos avanzados de esta patología.
  • Cudiados básicos - Pacientes que necesitan asistencia en las actividades de la vida diaria.
  • Cuidados de heridas: Cuidados de heridas limpias y administración de antibioterapia o terapia de vacío.
  • Agudizaciones de consiciones crónicas.
  • Cuidados Paliativos (algo que ya hemos comentado en este blog).
  • Rehabilitación general - Rehabilitación general, del habla, física y terapia ocupacional.
  • Administración de tratamientos de todo tipo por dispositvos centrales de acceso periférico
Es cierto que a estas organizaciones no les faltan críticas porque la persión asistencial y una inadecuada politica de personal (que denominaría "falta de magnetismo") provocan carencias en elementos esenciales en la asistencia sanitaria.

Pese a todo creo que serían una opotunidad para explorar y creo que en España tenemos legislación (ley 2/2007) que lo permitiría.

La ley de servicios profesionales pretendía servir para que estos pudieran emprender el camino de la asitencia de este tipo mediante sociedades multiprofesionales "horizontales" nuestro problema es que apenas tenemos formación en este aspecto salvo algún programa como el #OpenThinking de la EU Gimbernat (encabezado por Merce Muñoz) pero creo que aún queda mucho por recorrer.

Porque en lo que estamos fallando contínuamente es en acabar de vincular todas nuestras posibilidades profesionales con una mejora en los resultados para las personas, las familias y el sistema.

Y es que nuestros diseños de estudios Pre-Post nunca cuentan con datos previos de suficiente calidad sobre los eventos adversos y sobrecostes de la asistencia hospitalocentrista y en la fase post siempre pecamos de "sobreinspección" de los mismos pero esto debería dejarlo para otra entrada...





Circular #DiaEnfermería

 "La niña viene con una circular"¡¡ se escuchó gritar a la comadrona de tal forma que los asistentes se temieron lo peor...

Con una rápida maniobra la zafó de la peligrosa lazada y un poderoso llanto vino a demostrar que la criatura no se había visto afectada.

Así nacen muchas humanas desde hace miles de años porque la evolución antropométrica del canal de parto del homo sapiens hizo del nacimiento algo "social" (La especie elegida; J L Arsuaga et als Capítulos 10 y 11).

Así pudo ser el nacimiento, hace 197 años, de una niña en Florencia... una niña a la que sus padres, ingleses ellos, llamaron Florence y que pasaría a la historia por ser una de las fundadoras de la disciplina del cuidar: La enfermería. Por eso, no sin polémica, hoy se celebra el día internacional de la enfermería.


Es una fecha (otros le dedican una semana) en la que se suceden actos y declaraciones y en torno a la cual tratamos de reivindicar nuestro papel en la sociedad; o al menos de aparentar que se le reivindica.

Y así llega a nuestros hogares otra "circular" que es esa forma de tratar de que un trozo de papel con texto adquiera cierto rango de no se qué...

Pero lejos de reivindicar a la profesión y poner en valor sus capacidades el texto viene lleno de contradicciones y "olvidos".


Contradictorio me parece pedir a las enfermeras de AP que sean "valientes" y no tengan miedo al cambio que significa el programa de gestión de la demanda mientras que se trata de proteger la "parcela" de quienes habiendo optado por formarse para trabajar en gestión sanitaria se deben limitar a gestionar a "su" personal en un sistema sanitario cada vez más complejo, más orientado a los usuarios y a los procesos (justamente una de los temas de formación más "vendidos" por esta misma gente).

Olvido me parece pasar de puntillas por la falta de cumplimiento del decreto de especialidades de 2005 y pedir ciertas cosas respecto a las categorías y las bolsas de trabajo (que yo también reivindico) sin mencionar que hay especialidades en las que no se ha realizado la prueba de acceso extraordinario lo que adultera la distribución de plantillas; por no hablar de que en ciertos ámbitos se "vende la moto" de que todos los profesionales enfermer@s del sistema van (vamos) a ser especialistas lo que no dista nada de ser un brindis al sol.

Dice el ICN que somos la voz para liderar el camino hacia el desarrollo sostenible; no lo veo en estas líneas reflejado y mucho menos en cómo el propio ICN mira para otro lado mientras en España se persigue a las personas que tenemos una opinión contraria a los "líderes máximos".

Si las circulares de cordón representan un riesgo para el neonato, este tipo de comunicados resultan contraproducentes y no es de extrañar que mucha gente se reafirme en la desidia en lo que respecta al gobierno de la profesión.

Siempre hay que seguir investigando



Hace algunas semanas me encontré esta retórica pregunta en las RRSS...

Digo lo de retórica porque viniendo de un miembro de comité editorial de una revista de prestigio e investigador que ha publicado múltiples estudios de todo tipo no creo que tuviese intención de preguntarlo en serio, pero me llama la atención que un 38% respondiera que si entre ellos el propio que lo propone.

Para mi la respuesta viene a ser la misma esencia de la ciencia que es que el conocimiento no es un ente que esté formado y sea estático. Cualquier descubrimiento en un campo del conocimiento puede hacer que nos tengamos que replantear lo que se conoce en otro.

Además algunos diseños de investigación, en realidad lo que hacen es buscar cual debería ser el objeto de investigación en futuros estudios; léase por ejemplo un trabajo descriptivo tanto prospectivo como retrospectivo en el que se encuentra alguna relación no esperada cuya explicación ha de ser objeto de investigación ya con otro tipo de abordaje.

Por no decir de la investigación secundaria en la que es casi obligatorio descubrir aspectos en los que nuestro conocimiento es insuficiente; también genera cuestiones a dilucidar la necesidad de comprender las circunstancias locales y las personales en los campos de salud, tratamientos y organización... cuestiones a responder desde el paradigma cualitativo o con diseños mixtos.

Es más, en algunas publicaciones y eventos la tendencia es justamente la opuesta pues siendo conscientes de que siempre "hace falta más investigación" lo que marcan en sus instrucciones para autores es la inclusión obligatoria de un apartado de "implicaciones para la investigación futura".

Y es que llegar a una respuesta única y verdadera es lo menos científico que se pueda encontrar, lo que no quiere decir que cualquier técnica o elemento pueda considerarse terapia sin una causalidad demostrada.

Pero como respuesta final me quedo con esta:

https://twitter.com/HerrDV/status/853497986646781953

#HigieneDeManos Sin palabras

Nuevamente un 5 de Mayo dedicamos una entrada de este blog a hablar de la higiene de manos.

Durante estos años hemos escrito diversos abordajes desde una óptica económica por su alto Retorno de inversión y su peso como carga de trabajo hasta una propuesta de juego de rol; pasando por la necesidad de realizar abordajes multiestratégicos desde la dotación de estructura, recopilación y provisión de datos sobre consumo e infeccciones, recordatorios no estáticos, el cambio de hábitos y la necesidad de estudiar las circunstancias locales para actuar sobre las mismas....

Quizás para demostar que en lo importante sobran las palabras las compañeras de la unidad de enfermería 1A (Medicina interna) del hospital El bierzo han realizado este vídeo "vintage" que ha resultado ganador del concurso de vídeos de SACYL y que, sobre todo, ha servido para volver a hablar de ello y de lo importante que es.

COntubernio DEjadez Meritocracia: Sainete

https://twitter.com/tintateatro/status/667592762754244608
La tercera acepción de la RAE para sainete: "Situación o acontecimiento grotescos o ridículos y a veces tragicómicos."

Pueden ustedes decir que no entienden nada y les acepto en mi club... desde luego hay muchos intereses implicados y por lo tanto muchas versiones sobre los hechos lo cual resulta cuando menos confuso o "de enredo".

Asimilar la adopción de un sistema de compromisarios con un sistema representativo para permitir un gobierno operativo de una institución con 45000 soc@s "obligatori@s" debería tener como contrapartida un sistema de elección de compromisarios libre de toda duda a la vista de todos y no de un notario.

Es bien conocido que el BOE y otros boletines oficiales son el único lugar de publicación que otorga rango de realidad a las disposiciones como lo es que esa publicación estructura las publicaciones en apartados bien conocidos y regulados pese a lo cual los gobiernos se las apañan para "ocultar" la publicación de 'cosillas' como por ejemplo usando la ley de acompañamiento de los PGE para modificar el estatuto de los trabajadores y otras cosas por el estilo.

Así pues en un "club de socios" el tablón de anuncios es el lugar oficial de publicar las convocatorias lo demás es difusión. ¿que debería venir aparejada a la difusión de las otras actividades de la entidad? pues claro; es más las acciones que afectan al gobierno del "club" deberían estar destacadas. No hacerlo así y decir que el proceso es "normal" puede dar a entender que las personas que participan lo hacen partiendo de información que otr@s no tienen... o no supieron buscar o vigilar.

Y ya que hablamos de vigilar... ¿dónde está la Máxima autoridad cuando pasan estas cosas? pues no se sabe... parece que aquí las elecciones son fetén no como aquellas que se hacen en semana santa... o las que no dan el resultado apetecido.
Otros que tendrían que "vigilar" y presentan cierta dejadez son los gestores de la administración pública que ven como una y otra vez las elecciones en esos "clubs de socios" que tienen la obligación de tutelar acaban en pleitos y desgobierno pero ya bastante tienen con su propio baile de sillas como para ir a estos salones.

Y a todo esto está la gente que quiere "hacer que las cosas pasen" y sentir dignidad por su profesión que, francamente, o son inocentes o no sé bien a qué juegan porque conociendo el "modus operandi" de la pandilla lo suyo sería haber empleado la capacidad organizativa y sus redes en vigilar ese tablón (con fotos diarias) sobre todo en los días de reunión de junta... porque esto ya se sospechaba desde lo del teatro de marras...

Para terminar. Hay un punto especialmente oscuro en todo esto: La mesa electoral. Un proceso democrático ex-novo no "designa" mesa electoral o bien se constituye una mesa de edad o bien se sortea (mira para eso SI vale un notario)... desde luego el sistema de designación es más que sospechoso pero ello no convierte a las personas en criminales ni partes interesadas; no por lo menos sin escuchales y dejarles argumentar... porque lo que no veo muy edificante para construir una nueva enfermería es lapidar a la gente y sobre todo hacerlo sin dar la cara... con barbas y disfráz.



Puede que los hechos nos aclaren algunas cosas y sobre todo descubran los intereses que están chocando más allá de la aparente necesidad de control del dinero de las cuotas o del posible beneficio de orientar las necesidades de 45000 enfermeras en una u otra dirección... como si ellas no supieran.

Los sistemas que nos fatigan #SegPac

La siguiente entrada contiene la traducción de un artículo sobre una aproximación a como el análisis de los sistemas de trabajo nos puede ayudar a comprender la fatiga en las enfermeras en los hospitales que encuentro de interés por su enfoque, metodología y análisis.

A work systems analysis approach to understanding fatigue in hospital nurses
Linsey M. Steege, Kalyan S. Pasupathy & Diane A. Drake
http://dx.doi.org/10.1080/00140139.2017.1280186

EDICIÓN 3/5/17

Para completar este artículo les propongo este otro recién publicado y realizado en España sobre un total de 380 enfermeras: Como afectan el lugar de trabajo y la experiencia profesional a los valores profesionales de las enfermeras.

Introducción:
La fatiga ocupacional es un importante desafío en la consecución de una cultura de seguridad del paciente y para la mejora de la salud y seguridad de los profesionales. Entre los profesionales sanitarios, las enfermeras tienen una exposición habitual a estresores psicológicos, físicos y emocionales, que dan como resultado niveles relativamente altos de fatiga(1y2). Los estudios existentes han identificado una relación entre la fatiga y el potencial daño para los profesionales y errores en los pacientes (3,4 y 5). Además, los sistemas sanitarios sufren crecientes desafíos relacionados con las plantillas de enfermería y su bienestar y fidelización. Incrementar la comprensión de la fatiga en las enfermeras tiene impacto potencial en la salud y seguridad y calidad de la atención en los entornos de trabajo sanitario. Los elementos del medio de la práctica profesional incluyendo la cultura de la unidad, políticas organizativas y caracteristicas individuales de las enfermeras se asocian con diferencias en la fatiga ocupacional y constructos relacionados como el burnout (6, 7 y 8). En un estudio mediante entrevistas con enfermeras de hospital se identificaron las fuentes de fatiga y los facilitadores para el manejo y recuperación de las enfermeras que abarcan el sistema de trabajo de enfermería incluyendo herramientas y tecnología, tareas, organización, ambiente y características individuales de la enfermera (9). Sin embargo, pese a que muchos componentes de los sistemas de trabajo han sido identificados como asociados con la fatiga y la recuperación de las enfermeras hospitalarias sigue haciendo falta comprender sistemáticamente las interacciones entre los componentes de los sistemas de trabajo y como se relacionan con la fatiga.
El objetivo general de este estudio fue explorar las relaciones entre los múltiples componentes de la estructura del sistema de trabajo de enfermería en el hospital y los niveles de fatiga aguda, fatiga crónica y recuperación entre turnos. Se uso el modelo Systems Engineering Initiative for Patient Safety (SEIPS) como marco para caracterizar la estructura del sistema de trabajo de enfermería. El estudio tuvo dos objetivos: 1- Describir la asociación entre las variables que caracterizan cada uno de los componentes de la estructura del sistema de trabajo y la fatiga de las enfermeras y sus niveles de recuperación y 2- identificar las interacciones entre las variables que caracterizan los componentes de la estructura del sistema de trabajo relacionados con la fatiga de las enfermeras y sus niveles de recuperación.

Antecedentes:

La fatiga ocupacional puede definirse operativamente como un estado multidimensional que afecta a trabajadores expuestos a demandas excesivas y a estresores en las tareas de su trabajo, ambiente y programas y que pueden interferir con las habilidades físicas y cognitivas del trabajador y con su capacidad de funcionar normalmente(10). Tal y como se define, la fatiga tiene sus bases teóricas en la carga allocastica. La fatiga ocupacional generalmente se desarrolla como un estado agudo o breve que se solventa con suficiente recuperación entre turnos (11 y 12). La fatiga aguda puede evolucionar a un estado de fatiga crónica que progresa y tiene consecuencias más serias para la capacidad, rendimiento y salud del trabajador. La recuperación entre turnos media en esa progresión de los estados de fatiga (11). Sin embargo, la forma en la que las demandas del sistema de trabajo y los estresores contribuyen a la progresión de la fatiga aguda a crónica no se comprende bien. Es más, la forma en la que el diseño de los sistemas de trabajo impactan en la recuperación entre turnos no ha sido estudiada. Evaluando las relaciones entre los componentes del sistema de trabajo de las enfermeras y los estados de fatiga aguda y crónica y la recuperación entre turnos podemos aprender importantes lecciones sobre como diseñar y probar intervenciones para reducir la fatiga aguda, facilitar la recuperación y prevenir la fatiga crónica.

La investigación previa en fatiga ocupacional en la industria identificó la necesidad de sistemas de gestión del riesgo de fatiga (FRMS) para reducir los riesgos a corto y largo plazo para la salud del trabajador, la seguridad y su rendimiento. La sanidad es deficitaria respecto a otras industrias en implementar FRMS y contramedidas efectivas. El FRMS que se ha implementado en enfermería ha sido enfocado principalmente en medidas de higiene del sueño y estrategias de autogestión para que los trabajadores eviten la fatiga (13 y 14). Sin embargo, los cambios en los sistemas de trabajo en sanidad han provocado un número de factores potencialmente inductores de fatiga para las enfermeras, como una elevada complejidad de la tecnología, un incremento en las demandas de los pacientes, cambios en las estructura de los equipos y roles profesionales y una mayor regulación. Los trabajo previo identificaron relaciones entre factores individuales en el sistema de trabajo, como la duración de los turnos, su programación o la plantilla; factores psicosociales, incluyendo el control del trabajo y el apoyo social; las variables de las tareas de trabajo y la formación de las enfermeras o variables demográficas, y cambios en los niveles de fatiga ocupacional (15,16,17,18 y 19 ).

Estos factores generalmente han sido considerados de forma aislada unos de otros, lo que no representa la complejidad presente en los entornos de trabajo actuales y puede impedir el diseño de FRMS efectivos. La aproximación y los modelos de la ingeniería de sistemas puede proporcionar un marco apropiado para este análisis y puede facilitar el diseño mejorado de FRMS para resolver las lagunas y limitaciones de los estudios previos.

El modelo SEIPS es un marco teórico establecido para modelar los sistemas de entornos de trabajo en sanidad y mejorar su diseño (20 y 21). El modelo SEIPS integra el marco de Donabedian de estructura-proceso-resultado para evaluar la calidad (22) con el modelo de sistema de trabajo (23) y la teoría de balance (24). La estructura del sistema de trabajo de SEIPS posiciona a la persona, en el caso de este estudio una enfermera, en el centro. La persona interactúa con herramientas y tecnología, tareas, medio y componentes de la organización para realizar sus procesos de trabajo impactando al paciente, a si misma y a los objetivos de la organización. El modelo SEIPS incorpora la teoría de balance, que describe como los factores negativos en el sistema de trabajo, como aquellos que contribuyen a la fatiga o estrés del trabajador, pueden eliminados o minimizados mejorando otros componentes del sistema de trabajo (25 y 26). SEIPS proporciona una comprensión completa de los componentes críticos de un sistema de trabajo y las interacciones entre los mismos (27).

MÉTODOS

Diseño:

Este estudio es un análisis secundario de un estudio descriptivo en base a encuesta a enfermeras hospitalarias.

Encuesta:

Los datos se obtuvieron de la encuesta online sobre fatiga hospitalaria realizada a enfermeras tituladas que trabajan en un hospital de agudos comunitario sin ánimo de lucro en California. El propósito de la encuesta original fue evaluar la relación entre la fatiga de las enfermeras y el daño a los pacientes definido por la Teoría de la fuerza de enfermería hospitalaria (28 y 29). La recogida de datos se realizó entre noviembre de 2011 y febrero de 2012. Todas las enfermeras tituladas (1000 en total) empleadas en el hospital durante ese periodo fueron elegibles e invitadas a participar mediante correo electrónico. Se obtuvo la aprobación para el estudio del comité local de revisión.

Participantes:

430 enfermeras tituladas respondieron a la encuesta (tasa de respuesta 42%) y de estas 340 completaron el 90% de los items y fueron incluidas como muestra en este estudio. Una mayoría de participantes fueron mujeres (94,4%) y se identificaron como blancas (79,3%). Los participantes tuvieron un rango de edad entre 26 y 76 años con una media de 46 ± 11 años. Los participantes identificaron 16 tipos de unidad diferentes como su lugar de trabajo habitual. Otras características de la población se muestran en la tabla 1


Medidas:

La escala OFER (Recuperación del agotamiento por fatiga ocupacional) se usó para valorar la fatiga aguda y crónica y la recuperación entre turnos (30 y 31). Las tres subescalas han sido validadas previamente in poblaciones con trabajo a turnos, incluídas enfermeras, y tienen una alta fiabilidad con valores informados de alfa de Cronbach entre 0,84 y 0,91 (32 y 33). La validez de las escalas fue evaluada igualmente mediante analisis de factor de confirmación con un índice de adecuación de 0,95 y un error cuadrático de 0,05 (34). Cada subescala incluye 5 ítems. La puntuación se calculó basandose en los criterios de puntuación publicados para la OFER. La puntuación para cada escala oscila entre 0 y 100, las mayores puntuaciones indican un incremento en la fatiga aguda, crónica o en la recuperación entre turnos.
Se usó el modelo SEIPS como marco para definir un conjunto de variables que relacionasen los cinco componentes del sistema de trabajo: La enfermera, las tareas, el medio, la organización y Herramientas y tecnología. Como no existe un estándar o medida publicada sobre la estructura de sistema de trabajo SEIPS se identificaron los items que se relacionan con cada componente del modelo. El equipo del estudio seleccionó ítems de algunas encuestas existentes para medir el sistema de trabajo de la enfermeras tal y como lo define SEIPS en la encuesta de fatiga hospitalaria. Específicamente, los ítems sobre las prácticas de seguridad del paciente del modelo SEIPS fueron seleccionados de la encuesta sobre cultura de seguridad (35) Además, se identificaron desde el índice de trabajo de enefermería y la encuesta de entorno del paciente (36) y de la encuesta de evaluación de necesidades educativas para mejorar la seguridad del paciente (37) los ítems que caracterizan la educación de las enfermeras y sus habilidades, autonomía, control sobre su práctica, liderazgo y adecuación de recursos con los componentes del sistema de trabajo SEIPS (enferemra, tareas, herramientas y tecnología, medio y organización).
14 ítems de estos instrumentos previamente publicados fueron identificados por el equipo del estudio como relacionados con el componente "enfermera" de la estructura de sistema de trabajo; 6 ítems se relacionaron con "herramientas y tecnología"; 10 con "medio"; 17 con "organización" y 32 ítems con "tareas".
Esta distribución de los ítems entre los componentes de la estructura del sistema de trabajo se alinea con el trabajo previo sobre las descripciones que hacen las enfermeras de los factores de su trabajo que contribuyen a su fatiga (38). La enfermeras identificaron sus tareas como lo que más frecuentemente contribuye a su fatiga, seguido de la organización y los componentes psicosociales de su trabajo, el entorno físico, sus características individuales y por último la tecnología.
La mayoría de los ítems que caracterizan los componentes del sistema de trabajo fueron evaluados usando una escala de Likert de seis puntos entre 1= fuertemente en desacuerdo hasta 6= fuertemente de acuerdo. Algunos ítems fueron redactados positivamente de forma que el acuerdo indicase una percepción más positiva del entorno de trabajo, mientras que otros fueron orientados negativamente.
Se pueden ver todos los ítems en la tabla 2. 31 de los 79 componentes totales del sistema de trabajo usaron una escala de respuesta diferentes. Estos incluyen los ítems demográficos utilizados para evaluar el componente "enfermera" de la estructura de sistema de trabajo que resumimos en la tabla 1. Además los ítems que evalúan el conocimiento y la experiencia clínica tenía como respuesta las opciones: Novata, Iniciada, Competente, Proeficiente y Experta. Las respuestas para la pregunta sobre el puesto de trabajo actual fueron: Enfermera titulada de plantilla, Enfermera titulada a cargo, Enfermera titulada gestora, Enfermera titulada directiva, Combinanción y "otro". Sobre el rol primario de trabajo las opciones fueron: Atención al paciente, gestión del cuidado al paciente y provisión directa de cuidados al paciente. Por último tanto para grado de severidad de los pacientes como para grado de intensidad del cuidado al paciente se usó como escala de respuesta bajo, medio y alto.  

TABLA 2



Analisis:

Se usó un análisis de correlaión para describir las asociaciones entre variables que caracterizan cada componente del sistema de trabajo con los niveles de fatiga de las enfermeras. Debido a que muchas de las variables del sistema de trabajo utilizadas en este estudio fueron datos ordinales en lugar de datos de intervalos, se utilizó el Rho de Spearman. Se consideraron significativas las relaciones con p<0,05 y se usaron guías publicadas para evaluar el tamaño del efecto cuando 0,3 es un efecto grande (39) para los datos perdidos se usó la supresión de pares. Los análisis de correlación se realizadon con SPSS 22.
Para identificar las interacciones entre las variables de estructura del sistema de trabajo y la fatiga de las enfermeras y sus niveles de recuperación se usó un sistema de clasificación en árbol y CHAID: sistema automático de detección de interacción Chi-cuadrado (40) CHAID es un algoritmo exploratorio no paramétrico utilizado para identificar predictores y las interacciones entre predictores de una variable dependiente; fue desarrollado para apoyar la exploración de un gran número de variables categóricas; Por tanto, es una técnica de análisis apropiada cuando se utiliza un marco de sistemas para identificar las relaciones entre un gran número de variables que caracterizan a los componentes estructurales del sistema de trabajo y los niveles de fatiga de las enfermeras (41 y 42).
CHAID es también un sistema de clasificación. En contraste con los métodos de análisis que identifican diferencias entre niveles predefinidos de una variable independiente, CHAID identifica los niveles o grupos para cada variable predictora que se asocia con diferencias estadísiticamente significativas en la variable dependiente. CHAID se encuentra entre los métodos basados en la tendencia media y los métodos basados en la regresión, el primero calcula un valor para toda la población y el segundo calcula un valor diferente para cada individuo. CHAID determina subgrupos significativos mediante la partición de la población, de modo que los individuos dentro de un subgrupo son similares entre sí y significativamente diferentes de los otros subgrupos. Los resultados de un análisis utilizando CHAID pueden ayudar a: determinar cuál de los muchos predictores potenciales para una variable dependiente debe investigarse más a fondo para subgrupos específicos de la población en estudios posteriores; Cómo los predictores identificados interactúan para impactar la variable dependiente; identificando particiones de un nodo padre en nodos secundarios (43). Para cada nodo padre, se crean varias particiones y se realizan múltiples pruebas de Chi cuadrado para determinar el orden de las variables predictoras basadas en el estadístico F. CHAID se ha usado en estudios previos para explorar las relaciones entre las dimensiones de la fatiga y las percepciones sobre rendimiento de las enfermeras tituladas (44) así como entre factores psicológicos en el ambiente de trabajo y los niveles de fatiga (45).
En este estudio CHAID se usó para identificar las relaciones entre cada variable dependiente (Fatiga aguda, fatiga crónica y recuperación entre turnos) y la múltiples variables potencialmente predictoras que caracterizan los componentes de la estrucutra del sistema de trabajo. Todas las relaciones fueron significativas al menos al nivel de p<0,05 usandose la corrección de Bonferroni para ajustar los test múltiples. Para la partición, cada nodo padre que se puede dividir se requiere tener un mínimo de 20 participantes y cada nodo secundario formado debe tener al menos 10 participantes. Todos los análisis CHAID se realizaron con el software de árbol de decisión SPSS.

RESULTADOS

Los niveles de fatiga y recuperación medidos por las tres subescalas OFER oscilan entre 0 y 100 para la muestra del estudio. La media (DE) de recuperación entre turnos fue la más alta 56,5 (22,2), seguido de la fatiga aguda con 51,3 (20,2) y la crónica con 39,5 (25,4). La interpretación cualitativa de estos niveles se pude determinar basándonos en la distribución por cuartiles de la puntuación.  Sobre la base de los rangos de cuartiles calculados para cada subescala, el nivel intermedio de recuperación entre turnos para la muestra puede considerarse "bajo / moderado"; El nivel medio de fatiga aguda es "bajo / moderado"; Y el nivel medio de fatiga crónica es "moderado / alto". Las tres subescalas demuestran una fiabilidad aceptable en esta muestra; Los niveles alfa de Cronbach fueron 0,76 para la fatiga aguda, 0,85 para la fatiga crónica y 0,87 para la recuperación entre turnos. También hubo asociaciones significativas entre las tres subescalas. La fatiga aguda se asoció positivamente con la fatiga crónica r(267) = 0.651, p < 0.001. La recuperación entre turnos se relacionó negativamente con la fatiga aguda r(267) = −0.636, p < 0.001 y la crónica r(280) = −0.547, p < 0.001.

Análisis de correlación:
Se observan correlaciones significativas entre múltiples variables para cada componente del sistema de trabajo y las escalas OFER de fatiga aguda, crónica y recuperación entre turnos (tabla 2). Para el componente "enfermera" del sistema de trabajo la mayoría de las asociaciones eran pequeñas y las asociaciones significativas variaban entre las escalas de fatiga y recuperación. Hubo dos relaciones moderadas entre la experiencia profesional y la edad, y la recuperación entre turnos. Para los componentes del sistema de trabajo "Herramientas y tecnología", "Medio", "Organización" y "Tareas" las variables se relacionaron significativamente con las tres escalas OFER con efectos medios o grandes. Para el componente "organización" las variables que caraterizan la percepción de las enfermeras sobre el trabajo en equipo positivo, la autonomía o la cultura de trabajo se corelacionaron más frecuentemente de forma negativa con las escalas de fatiga aguda y crónica, mientras que las variables que caracterizan la programación del trabajo se relacionan significativamente con más frecuencia sólo con la recuperación entre turnos. Entre las variables para el componente "tareas" del sistema de trabajo, relativamente pocas de las que describen el porcentaje de tiempo dedicado a diferentes tareas se asociaron significativamente con los estados de fatiga o la recuperación entre turnos; sin embargo, las variables asociadas con las percepciones de las enfermeras sobre las necesidades de las tareas se asociaron positivamente con la fatiga crónica y la  aguda y se negativamente con la recuperación entre turnos. Por el contrario, las enfermeras que percibián tener tiempo suficiente para realizar las tareas se asoció negativamente con los niveles de fatiga crónica y aguda y positivamente con la recuperación entre turnos.

Clasificación en árbol usando CHAID
Los análisis CHAID se realizaron utilizando cada una de las tres escalas de fatiga OFER como una variable de resultado y el conjunto completo de variables asociadas con los componentes del sistema de trabajo (enumerados en la tabla 2) como variables predictoras.
El resultado se presenta en forma de árboles de clasificación (figuras 1 a 3). La media y la desviación estándar de la variable dependiente para la muestra completa se enumeran en el nodo en la parte superior del árbol. El siguiente nivel del árbol indica el predictor más significativo que surgió en el análisis basado en el estadístico F. Los nodos secundarios a este nivel se basan en divisiones significativas en las opciones de respuesta para esa variable predictora. La media (DE) de la variable dependiente para las encuestadas en cada división se muestra en la casilla correspondiente a cada nodo secundario. Se muestran los predictores significativos adicionales en cada nivel del árbol. Cada combinación principal-secundario de las variables predictoras divide el conjunto de datos en varios subgrupos. Estas combinaciones muestran las interacciones de las variables predictoras en la determinación del resultado (variable dependiente) (46)

Figura 1
Fatiga aguda:
En la figura 1 se observa que la media OFER para fatiga aguda es 51,3 (20,2) para toda la muestra (N=273). El siguiente nivel del árbol indica que el predictor más significativo de la fatiga aguda fue un componente de la variable "organización": "tiempo para comunicarse con gestores/supervisores" quienes estuvieron 'fuertemente de acuerdo' con que tenían suficiente tiempo para comunicarse con gestores/supervisores informaron un menor nivel de fatiga con una media de 37,3 (19,4) seguidos de 'de acuerdo' o 'algo de acuerdo' 50.0 (18.9) y 'desacuerdo', 'algo desacuerdo' y 'fuertemente en desacuerdo' 63.9 (19.4). Aquellos que percibieron que no tienen tiempo para comunicarse con los gestores/supervisores tenían puntuaciones de fatiga aguda que eran casi dos veces más altas que aquellos que estaban completamente de acuerdo con ese ítem.
Para aquellos que informaron 'algo de acuerdo' o 'de acuerdo' con el tiempo para comunicarse con los gestores/supervisores, las percepciones de "trabajo excesivo" también se asociaron con las diferencias en la fatiga aguda. Específicamente aquellos que estaban 'fuertemente en desacuerdo' o 'desacuerdo' con que tenían "trabajo excesivo" tenían un nivel de fatiga aguda de 32.7 (14.3), este valor se incrementaba a 45.9 (17.8) para aquellas que estaban 'algo en desacuerdo' y a 51.5 (18.5) para quienes dijeron estar 'algo deacuerdo' o 'deacuerdo' y quienes respondieron que estaban 'fuertemente de acuerdo' informaron el nivel más alto 58.6 (19.2). Las enfermeras que respondieron que estaban 'algo en desacuerdo' con que tienen "excesivo trabajo" también informaron niveles variables de fatiga aguda en la variable "resistencia al cambio" en el componente "organización" del sistema de trabajo SEIPS. Las enfermeras que informaron cualquier nivel de 'acuerdo' con la "resistencia al cambio" tuvieron un alto nivel de fatiga aguda 57.3 (19.8) comparadas con las que mostraron cualquier nivel de 'desacuerdo' 40.4 (14.0). Por otra parte, entre las enfermeras que informaron estar 'algo de acuerdo' o 'de acuerdo' con tener suficiente tiempo para comunicarse con gestores/supervisores y 'algo de acuerdo' o 'de acuerdo' con que tienen "excesivo trabajo" la media de horas extra trabajadas a la semana se asoció con diferencias en la fatiga aguda. Si el número de horas extra trabajadas era menor o igual a 1, la fatiga aguda era 45.1 (18.6), se incrementaba a 59.6 (15.1) para 2 horas extra/semana y saltaba a 42.7 (24.1) para 3 o 4 horas extra/semana y finalmente a 58.5 (15.4) para más de 4 horas extra a la semana.
Por último entre las enfermeras qeu informaron cualquier nivel de 'desacuerdo' con tener tiempo suficiente para comunicarse con gestores/supervisores, la variable "Estres informático" del componente "herramientas y tecnología" del SEIPS fue un factor significativo. Las enfermeras que informaron estar 'fuertemente de acuerdo' o 'de acuerdo' con tener "estrés informático" presentaron niveles de estrés agudo significativamente mayores 73.1 (11.9) que las que informaron estar 'algo de acuerdo' o 'desacuerdo' a cualquier nivel 54.3 (21.3). Además, entre las enfermeras que estaban 'fuertememente de acuerdo' o 'de acuerdo' con el "estrés informático", el área de trabajo "ruidosa" fue un factor significativo, las que estaban 'fuertemente de acuerdo' tuvieron fatiga aguda de 83.0 (10.5) frente a 66.4 Resto de los participantes.

Figura 2

Fatiga crónica:
El "Excesivo trabajo" fue el predictor más significativo de las diferencias en los niveles de fatiga crónica. Específicamente, la fatiga crónica se incrementó más de tres veces desde una media de 17.2 (16.2) para quienes estaba 'fuertemente en desacuerdo' o 'desacuerdo' con el item "excesivo trabajo", a una media de 59.5 (25.5) para quienes estaban 'fuertemente de acuerdo' (figura 2). Las enfermeras que informaron estar 'algo de acuerdo' o 'de acuerdo' con que tienen "excesivo trabajo" se diferenciaron por su rol laboral primario. Las que eran proveedores directos de cuidados al paciente tenían la media de fatiga crónica inferior 22.5 (17.9) y las que gestionan cuidados informaron un mayor nivel de fatiga con 51.0 (25.1). Además, entre las enfermeras que identificaron su papel principal como "atención al paciente", el "control de la práctica" también fue un predictor significativo de la fatiga crónica. Concretamente, las enfermeras que estaban en desacuerdo en algún nivel ('Algo en desacuerdo' 'en desacuerdo' o 'fuertemente en desacuerdo') con que tienen el control de la práctica tuvieron niveles significativamente más altos de fatiga crónica59,6 (24,3) en comparación con las que estuvieron de acuerdo en cualquier nivel con este ítem 38,6 (21,1).
Para el grupo que estaba 'fuertemente de acuerdo' con que tenía "excesivo trabajo", la "adopción rápida" de nuevas técnicas o tecnologías fue un predictor significativo en las diferencias en fatiga crónica. Cualquier nivel de 'descuerdo' o aquellas que se dijeron 'algo de acuerdo' con la "adopción rápida" se asoció con niveles de fatiga significativamente mayores 70.3 (21.9), mientras que aquellas que estaban 'de acuerdo' o 'fuertemente de acuerdo' con este item presentaron un nivel de fatiga crónico de 46.6 (24.0). Finalmente, para las enfermeras que estaban 'fuertemente en desacuerdo, 'en desacuerdo', 'algo desacuerdo' o 'algo de acuerdo' con la "adopción rápida", el "papel principal" nuevamente emerge como predictor significativo. Aquellas cuyo "papel principal" era la atención directa al paciente tuvieron un nivel significaticamente menor de fatiga crónica 60.3 (22.0) comparados con aquellas que tienen un rol de gestión de cuidados o dirección 81.3 (16.2).

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Figura 3
 

Recuperación entre turnos:

El predictor más significativo de la recuperación entre turnos fue "esfuerzo excesivo". Las enfermeras que estaban 'fuertemente en desacuerdo' o 'desacuerdo' con que su trabajo les exige un "esfuerzo excesivo" presentaron los niveles más altos de recuperación entre turnos con 68.3 (19.3), mientras que para aquellas que estaban 'algo desacuerdo' el nivel fue de 60.9 (20.2) y para el resto de respuestas (con cualquier nivel de acuerdo) el nivel fue de 50.7 (21.9). Cada uno de esos tres grupos tiene sus predictores significativos (figura 3).
Entre las enfermeras que estaban 'fuertemente desacuerdo' o 'desacuerdo' con el "esfuerzo excesivo", el "conocimiento enfermero" fue un predictor significativo. Las enfermeras que se autocalificaron como 'proeficientes' tuveiron un mayor nivel de recuperación entre turnos 76.4 (15.5) comparadas con el resto ("Experta", "Competente" y "Novata") 61.1 (19.7).
Para las enfermeras que estaba 'algo desacuerdo' con el "esfuerzo excesivo" la experiencia como enfermeras tituladas fue un predictor importante. Aquellas que tenían más de 5 años de experiencia tuvieron una media de recuperación entre turnos de 48.8 (23.4), que se incrementa a 65.6 (15.6) para las enfermeras con entre 5 y 11 años de experiencia, volviendo a bajar a 48.5 (19.7) para las enfermeras con entre 11 y 18 años de experiencia y finalmente se incrementa al nivel más alto 72.7 (12.3) para aquellas con más de 18 años de experiencia.
Para finalizar, para las participantes que tuvieron cualquier nivel de acuerdo con el "esfuerzo excesivo" hubo dos niveles de predictores significativos; la experiencia como enfermera titulada y las horas por turno. Aquellas que trabajaron cuatro años o menos como enfermera titulada tuvieron una recuperación entre turnos de 38.6 (19.8) y aquellas que trabajaron más de cuatro años como enfermeras tuvieron un nivel de 54.4 (20.9). Además, para las enfermeras con más de cuatro años de experiencia como enfermera, trabajar más de 12 horas/turno redujo la recuperación inter-turnos a 41,4 (21,4), mientras que trabajar hasta 12 horas / turno aumentó la recuperación entre turnos a 57,4 (19,9).

DISCUSIÓN:
Este estudio confirmó la relación significativa entre variables individuales en los sistemas de trabajo de enfermería y los niveles de fatiga usando un modelo de sistemas de ingeniería establecido (SEIPS) para caracterizar las relaciones simultáneas entre múltiples variables que abarcan todo el sistema de trabajo y los niveles de fatiga y recuperación en enfermeras de hospital.
Las variables de todos los componentes de la estructura del sistema de trabajo están asociadas con diferencias en la Fatiga Aguda,  Crónica y la Recuperación entre turnos. Estos hallazgos apoyan la aplicación futura de un enfoque de sistemas para diseñar intervenciones para abordar la fatiga y minimizar los riesgos asociados a la salud y la seguridad de la enfermera. Los hallazgos también indicaron que las interacciones entre las variables que abarcan la estructura del sistema de trabajo apoyan aún más la necesidad de considerar múltiples variables o fuentes de fatiga juntas en vez de evaluar la exposición a demandas individuales o estresores aisladamente para los programas de monitorización de la fatiga y gestión del riesgo.

Asociación entre la persona y la fatiga de las enfermeras y su recuperación.
El modelo SEIPS posiciona a la persona, en este caso la enfermera, en el centro del sistema de trabajo. Esta posición es intencionada, como el objetivo de la ingeniería de factores humanos y del modelo SEIPS es asegurar el diseño de sistemas de trabajo que apoyen el desempeño humano y la seguridad. Con respecto a las fuentes de fatiga, las variables asociadas con el componente de del sistema de trabajo de eenfermería se correlacionaron significativamente con más frecuencia  con la recuperación entre turnos y en cierta medida con la fatiga aguda. Los años de experiencia como enfermera titulada, la edad, el rol primario y la experiencia clínica se relacionaron positivamente con la recuperación entre turnos. Las enfermeras que informaron mayor experiencia, mayores niveles de experiencia clínica y roles de gestión lejos de la atención directa al paciente informaron mayores niveles de recuperación entre turnos. Esto puede deberse a las diferencias en el tipo de trabajo, a un mejor afrontamiento y adaptación o a estrategias protectoras personales. Esto se refiere a menudo como un efecto de supervivencia, en el que algunos trabajadores son capaces de protegerse y adaptarse a factores de estrés y peligros en el entorno de trabajo (47). Es importante tener en cuenta la experiencia de los "supervivientes" en el diseño de programas de gestión del riesgo de fatiga en los sistemas sanitarios; En particular, al diseñar los niveles de control de riesgos ocupacionales que se utilizan en los programas de capacitación y educación para desarrollar estrategias de protección personal en las enfermeras de nueva incorporación o novatas (48).

Asociación entre herramientas y tecnología y la fatiga y recuperación de las enfermeras.
Casi todas las variables sobre herramientas y la tecnología que se incluyeron en el estudio se corelacionaron signitifcativamente con la fatiga aguda, crónica y la recuperación entre turnos, incluyendo efectos de tamaño considerable. Esto apoya los hallazgos de estudios previos que señalaban que las enfermeras identifican la tecnología y el acceso a suministros como factores que pueden prevenir o moderar el desarrollo de fatiga (49 y 50).

Asociaciones entre el medio y la fatiga y la recuperación de las enfermeras
De modo similar, las variables asociadas con el medio, en particular aquellas que pueden impactar la habilidad de las enfermeras para gestionar su fatiga o su recuperación entre turnos (por ejemplo acceso a espacios de descanso, oportunidades para comer o beber) se asociaron con la fatiga y la recuperación. Muchas de estas asociaciones tenían efectos medios o grantes. as enfermeras que participan en actividades de recuperación durante el turno de trabajo pueden disminuir sus niveles de fatiga ocupacional y también reducir su necesidad de recuperación adicional entre los turnos de trabajo. Esto es importante a considerar ya que las recientes recomendaciones sobre los riesgos de fatiga hacen hincapié en la responsabilidad de que las empresas se aseguraren de que las enfermeras pueden descansar y pueden dormir durante los descansos (51). Sin un diseño apropiado del medio de trabajo las enfermeras que podrían descansar no lo harán. Al mismo tiempo, el rediseño del ambiente físico puede no ser factible en muchos puestos de trabajo de enfermería. En estos casos, de acuerdo con la teoría del balance, otros aspectos del diseño del sistema pueden ayudar a compensar el impacto negativo de las barreras ambientales en la fatiga y la recuperación. En este estudio, centrase en la cultura organizativa podría ayudar a compensar las barreras en el medio físico para una gestión eficaz del afrontamiento o de la fatiga durante los turnos de trabajo. Esto puede ser particularmente importante ya que otros trabajos informan que incluso cuando las organizaciones buscan asegurar que las enfermeras realicen pausas de trabajo ininterrumpidas y tengan oportunidades de salir de la unidad durante un turno de recuperación con frecuencia son reacias a descansar(52 y 53). Por lo tanto, un mayor énfasis en la cultura de la unidad y en las variables organizativas del sistema de trabajo puede ayudar a facilitar los descansos y la recuperación a pesar de tener ambientes físicos mal diseñados.

Asociaciones entre la organización y la fatiga y la recuperación
Entre las variables del estudio asociadas al componente de organización del sistema de trabajo de enfermería, algunas de las variables comúnmente incluidas en investigaciones previas relacionadas con las fuentes de fatiga y manejo del riesgo de fatiga, tales como horas trabajadas por semana, horario de turno principal y horas trabajadas por turno no se correlacionaron significativamente con fatiga aguda o crónica. Esto pudo deberse a una limitación del método de muestreo para este estudio, realizado en un único hospital con una variabilidad limitada en los modelos de programación y tipos de turno. Sin embargo, mientras que estas variables de nivel organizacional no se correlacionaron significativamente con la fatiga, otras relacionadas con la cultura organizacional y factores psicosociales como el control sobre el trabajo, la comunicación con los gestores y la autonomía estaban significativamente correlacionadas de forma negativa con la fatiga y de forma positiva con la recuperación. Esto apoya los hallazgos de estudios previos en los que se identificaron los atributos organizacionales y la cultura del sistema de trabajo como fuentes importantes de fatiga y también factores que impactaron en su capacidad para afrontar eficazmente la fatiga a medida que surge (54). Los esfuerzos para implementar el FRMS en enfermería deben tener en cuenta el importante papel de la organización en la aceptación y la efectividad de tales programas. Además, de acuerdo con la teoría de balance, aunque algunos aspectos de la programación de turnos y la duración del cambio pueden ser difíciles de alterar en algunas organizaciones sanitarias, existen oportunidades de mejorar la cultura organizacional para minimizar la fatiga y sus consecuencias asociadas para la salud y la seguridad de la enfermera y el paciente. La falta de autonomía o falta de apoyo del supervisor, específicamente, son factores identificados en múltiples estudios como contribuyentes a la fatiga de las enfermeras que pueden ser susceptible de intervenciones o rediseño del sistema de trabajo (55).

Asociaciones entre tareas y la fatiga y recuperación.
La evaluación de las asociaciones entre las variables de "tareas" y la fatiga y el afrontamiento, indicaron que las variables de presión de tiempo relacionadas con el tiempo adecuado para las tareas se asociaron negativamente con la fatiga y se asociaron positivamente con los niveles de recuperación. Además, varias características de la tarea (por ejemplo, esfuerzo físico, atención emocional, atender a varias tareas simultaneamente) se asociaron significativamente de forma positivs con la fatiga aguda y crónica, y negativamente con los niveles de recuperación entre turnos. Las demandas de tiempo y tareas han sido previamente identificadas por las enfermeras como los factores que más contribuyen a la fatiga en su trabajo. Curiosamente, mientras que algunos estudios informaron que la experiencia de las enfermeras sufren mayores niveles de fatiga mental que de fatiga física (56), las percepciones de las enfermeras de las demandas de concentración mental no se asociaron significativamente con la fatiga o la recuperación en nuestro estudio. Pese a que las escalas de la gravedad del paciente se usan a menudo para cuantificar la carga de trabajo de enfermería, las percepciones de las enfermeras sobre la gravedad del paciente o la intensidad del cuidado en nuestro estudio no se asociaron significativamente con la fatiga o la recuperación. Además, el tiempo dedicado a tareas específicas generalmente no se asoció con fatiga o recuperación nuestro estudio. Esto puede indicar que son precisas nuevas medidas de la carga de trabajo de enfermería y de las necesidades de los pacientes para poder monitorizar mejor el riesgo de fatiga y mejorar la salud y la seguridad de las enfermeras.

Interacciones entre los componentes del sistema de trabajo y la fatiga y recuperación.
Los resultados del análisis CHAID apoyan la importancia de una aproximación sistemática para monitorizar y afrontar la fatiga y los riesgos asociados en los sistemas de trabajo de enfermería. Para cada medida de fatiga y recuperación se identificaron interacciones significativas entre variables de los diferentes componentes de la estructura del sistema de trabajo. Estas interacciones se usaron para caracterizar mejor las complejidades y exposiciones simultáneas a demandas y estresores en el medio de trabajo e identificar los grupos específicos para adaptar las intervenciones de seguimiento y gestión del riesgo. Al igual que los hallazgos en el análisis de correlación, las variables de demanda de tiempo y los factores psicosociales relacionados con la autonomía de la enfermera, la comunicación con los directivos y el control fueron predictores significativos de Fatiga Aguda y Fatiga Crónica. Estas interacciones se vieron afectadas por las variables ambientales y de herramientas y tecnología. Una vez más la teoría de balance y el modelo SEIPS pueden ofrecer estrategias para abordar estas relaciones complejas.
Las enfermeras en roles de gestión tienen mayores niveles de fatiga crónica que otros roles entre las enfermeras que informaron un excesivo trabajo. Observamos que la proporción de enfermeras en la muestra que identificaron su rol de trabajo primario como gestor o director fue relativamente pequeña en comparación con aquellas que identificaron un rol de atención del paciente. El algoritmo CHAID requiere un número mínimo de participantes en cada grupo de clasificación. Por lo tanto puede que no se detectaran otras diferencias en como se asocian los componentes de la estructura del sistema de trabajo con la fatiga y la recuperación para enfermeras en diferentes roles debido a un numero insuficiente de enfermeras gestoras o en niveles directivos, lo que justificaría un estudio centrado en la fatiga crónica entre las enfermeras con funciones administrativas. Con todo se justifica una mayor atención a los niveles de fatiga entre la enfermería de primera línea especialmente mientras continuen los problemas de retención de profesionales y planificación de plantillas. Las líderes de la profesioón identifican la necesidad de mejorar la formación de líderes como el reto más importante (57). El envejecimiento, las percepciones negativas sobre la carga de trabajo en las posiciones de gestión de enfermería y las inminentes jubilaciones contribuyen a dificultar la llegada y retención de gestores enfermeros (58). Aunque la asociación entre el diseño del sistema de trabajo y la salud y seguridad de la enfermera ha sido bien estudiada (59), las interacciones entre múltiples componentes del sistema de trabajo y cómo se relacionan conjuntamente con la fatiga de las enfermeras no han sido ampliamente consideradas. Además, las relaciones entre los componentes del sistema de trabajo y la fatiga en los líderes de enfermería no han sido bien estudiados y altos niveles de fatiga en este grupo podría afectar la forma en que se comunican con el personal de enfermería. Dado que la comunicación con los gestores ha sido identificada como significativamente asociada con la fatiga entre enfermeras, los altos niveles de fatiga en los mismos también pueden contribuir al riesgo de fatiga en las enfermeras. Por último, los niveles de fatiga crónica de las enfermeras varían en función de la percepción del control / autonomía de enfermería, mientras que la adopción de nuevas prácticas y tecnología por parte del hospital ha tenido un efecto significativo en la fatiga crónica de las gestoras. Esto pone de relieve las diferencias en las fuentes de fatiga en los diferentes roles lo que llevaría a que los programas de gestión del riesgo de fatiga pueden necesitar ser diseñados diferencialmente para enfermeras en diferentes roles.

Conclusiones:

Este estudio demuestra como un modelo de sistema de trabajo puede contribuir a una mejor comprensión de los factores de riesgo de fatiga que abarcan todo el sistema y ayuda en la identificación de los patrones en las combinaciones de las variables del sistema de trabajo que están asociados con un mayor riesgo de fatiga. La utilización de este enfoque permite una representación más precisa de la complejidad en los entornos de trabajo sanitario. Nuestros hallazgos ilustran los múltiples factores asociados a cuambios en la fatiga y recuperación entre los componentes del sistema de trabajo. Usando estos hallazgos, podemos diseñar futuros estudios para medir mejor, modelar y predecir los niveles de fatiga después de la exposición a diferentes sistemas de trabajo. Se pueden utilizar modelos mejorados de fatiga ocupacional para evaluar el efecto de las intervenciones y también como base para herramientas de apoyo a la toma de decisiones más precisas y eficaces para guiar a los profesionales y líderes de enfermería en la gestión del riesgo de fatiga (60). A medida que pretendemos mejorar la salud y la práctica de la enfermería en los complejos ambientes sanitarios, se necesita un enfoque sistématico para guiar las medidas de evaluación de la fatiga, las estrategias de monitorización y las intervenciones de gestión de riesgos. En última instancia, esto puede permitir una mejor administración y diseño de los entornos de práctica de la enfermera en el hospital y una mayor salud y seguridad de la enfermería.


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